Sentimientos encontrados. Después de hacer un buen examen del máster el pasado viernes, y de un sábado en el que disfruté con la compañía de mis amigos y un domingo en el que también tuve una comida…ha llegado una nueva semana.
Dejando a un lado la cuestión futbolistica, que reconozco me ha fastidiado mucho. Voy a lo que realmente me importa, incomoda y me hace sentir mal.
Las oposiciones de auxiliares administrativos de la CARM del 2005. En concreto el tercer examen de informática.
En mayo del 2005 se hizo ese examen, salió la lista provisional de aprobados, suspensos. Una lista en la que había muchas notas altas, todo es cierto. Un grupo de iluminados se decidió a impugnar el examen y debido a la poca valentía de la anterior consejera se decidió suspender el procedimiento y abrir un expediente. No me voy a detener en el proceso, recursos, autos, sobreseimientos, etc. La cuestión es que el pasado septiembre nos enteramos de que:
1. El juez no ha encontrado culpables, más bien ninguno de los jueces que ha examinado el caso.
2. El juez no ha tenido pruebas para ordenar la repetición del examen.
3. El juez habla de indicios, no pruebas. Y recomienda repetir.
4. La administración se decide a repetir el examen, sin encontrar culpables, ni pruebas, ni nada.
Y aquí me encuentro yo, cinco años después, con un examen aprobado y que tengo que repetir sin que nadie me diga donde están los culpables de que yo me tenga que examinar.
De los iluminados no voy a hablar, porque no quiero que ahora me aparezca una querella, pero es obvio que mi opinión acerca de ellos es…»algo negativa».
Ahora sólo espero que sea cuanto antes, porque muchos estarán trabajando, pero yo me encuentro en la calle entre otros muchos motivos por su culpa.
¿Justicia? Me río de esa palabra. Pero tarde o temprano, todos acabamos donde merecemos.