Dejando atras la zona de Las Villas y entrando en la propiamente llamada Torre de la Horadada, llegamos por el paseo que nos ofrece una buena vista de la zona acantilada, con la playa y el puerto al fondo.
Todavía recuerdo cuando el paseo era de tierra y piedras y había que bajar a la playa por una cuesta que cuando llovía se ponía «un poco» impracticable. Ahora es un buen sitio para pasear, tomarse un refresco o, simplemente, contemplar las vistas.
Esero que os gusten las imágenes.